Uber Eats alerta al Gobierno de la falta de repartidores por la ley ‘rider’

La empresa de reparto de alimentos a domicilio Uber Eats ha alertado a la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, de la falta de repartidores como consecuencia de la ley «rider».

Uber Eats ha publicado este martes una carta abierta en la que pide reunirse con la vicepresidenta para abordar esa carencia, que también atribuye a que muchos repartidores prefieren trabajar con Glovo, porque esta firma «no cumple la ley» y los mantiene como autónomos.

En la misiva, la directora general de Uber Eats en España, Courtney Tims, ha subrayado que las flotas colaboradoras con esta empresa tienen cada día «más problemas» para encontrar repartidores y atender a la creciente demanda de comida a domicilio.

Tims ha relacionado esa falta de personal con las consecuencias de la ley «rider», «que sufren clientes y restaurantes» por la tardanza de pedidos y la acumulacIón de comandas que nadie recoge.

Ha recordado que Uber Eats «hizo un esfuerzo» para adaptarse a la ley, lo que implicó que desde el pasado 12 de agosto todos los repartidores con los que trabaja tienen un contrato, opción a la que se acogió «la mayoría» del sector español de entrega a domicilio o «delivery» español.

Pero en la misiva se ha referido a Glovo, que «decidió seguir operando con trabajadores autónomos», lo que para Uber Eats supone contravenir el cumplimiento de la ley

«Vemos con impotencia cómo el Gobierno no ha conseguido hacer cumplir la ley «rider». Y cómo la situación de desventaja de todas las empresas que sí la cumplimos empeora cada día», según la misiva.

«Ante esta situación, todos nos hacemos la misma pregunta: ¿Debemos seguir el ejemplo de Glovo y trabajar con autónomos para poder competir en igualdad de condiciones?», ha remarcado la responsable de Uber Eats.

Además, ha recordado que cuando se negoció la ley «rider» muchas asociaciones de repartidores se manifestaron para que estos trabajadores siguieran siendo autónomos y se mantuviera la «flexibilidad».

«Más de seis meses después de su entrada en vigor, las empresas que cumplimos la ley nos encontramos con una situación paradójica. Nuestras flotas colaboradoras no encuentran repartidores porque éstos prefieren ser autónomos, de manera que trabajan con Glovo», según la misiva.