España, Francia, Italia y Austria piden pruebas de estrés para controlar a las gestoras

La Comisión Europea está a punto de iniciar su consulta pública sobre el tratamiento macroprudencial del riesgo en el sector de las gestoras de activos. En este contexto, cuatro autoridades de los principales mercados europeos – la CNMV de España, la FMA de Austria, la AMF de Francia y la CONSOB de Italia – han compartido sus opiniones sobre las prioridades en esta área.

Los reguladores de todo el mundo han estado examinando los riesgos asociados con la intermediación financiera no bancaria (IFNB) en los últimos años, especialmente debido a su creciente importancia en el sistema financiero global. También ha habido preocupaciones sobre los posibles efectos negativos significativos que los shocks, ya sean propagados por o originados en el sector de la IFNB, podrían tener en la economía real.

Al elaborar normativas para abordar los riesgos en las gestoras de activos, es crucial considerar sus características específicas. El ecosistema de la gestión de activos es distinto al de los bancos y es tan diverso como las vulnerabilidades que se han observado hasta ahora.

Por lo tanto, estos cuatro reguladores han enfatizado en un comunicado de prensa la necesidad de definir con precisión la naturaleza de los riesgos que desean abordar, centrándose prioritariamente en aquellos casos en los que las características de la gestión de activos generen una excesiva volatilidad de precios y tensiones de liquidez. En su opinión, los requisitos de capital y los colchones de liquidez no son las soluciones más adecuadas para mitigar estos riesgos en términos de estabilidad financiera.

Las 5 consideraciones de las autoridades para el sector de las gestoras de archivos

En relación con estas consideraciones, las autoridades española, austriaca, francesa e italiana han identificado cinco prioridades relacionadas con el sector de la gestión de activos, tres de las cuales se refieren a medidas a corto y mediano plazo, mientras que las otras dos deberían explorarse a largo plazo.

En primer lugar, uno de los objetivos es garantizar una amplia disponibilidad y un mayor uso de herramientas de gestión de liquidez (LMT por sus siglas en inglés) en todo tipo de fondos de inversión abiertos (OEF por sus siglas en inglés). La actual revisión de la Directiva de Gestores de Fondos de Inversión Alternativos dará lugar a un avance significativo en la implementación de estas herramientas, aunque sus normas de desarrollo aún están pendientes de elaboración.

Por otro lado, las autoridades buscan prohibir la contabilidad a coste amortizado para los fondos del mercado monetario. La contabilidad a coste amortizado se considera intrínsecamente perjudicial para la estabilidad financiera, ya que proporciona información engañosa a los inversores, haciéndoles creer que cuentan con un valor neto de los activos (VAN) estable, lo que genera incentivos para realizar movimientos tempranos.

Realizar pruebas de estrés

Realizar pruebas de estrés es otra de las consideraciones que buscan. En especial, centrarse en todo el sistema para una mejor comprensión de las vulnerabilidades de cada grupo de gestión de activos y de sus interconexiones con otros participantes en el sistema financiero.

Seguidamente, implementar un enfoque de supervisión verdaderamente consolidado para los grandes grupos transfronterizos de gestión de activos. Dado que actualmente están supervisados por diferentes autoridades competentes nacionales en todo el mundo, la formación de un colegio de supervisores para estos grupos proporcionaría importantes beneficios en tiempos de tensión y en condiciones normales de mercado.

Por último, los expertos buscan crear un centro de datos integrado compartido por supervisores de mercado y bancos centrales, que atienda sus respectivas necesidades tanto para la supervisión diaria como para la realización de pruebas de estrés.