Caso BBVA-Villarejo: el exdirector de contabilidad del banco, otro ejecutivo que niega cualquier relación con el excomisario

 El exdirector de contabilidad de BBVA Ricardo Gómez Barredo ha dicho este viernes en la Audiencia Nacional que nunca tuvo relación alguna con el excomisario José Manuel Villarejo o con sus empresas, cuyos contratos con el banco nunca manejó y solo conoció por la prensa. Gómez Barredo es otro de los ejecutivos, retirados o en activo, del banco presidido ahora por Carlos Torres que niega cualquier vinculación con el caso, pese a que están imputados en la causa BBVA-Villarejo desde el propio banco como persona jurídica responsable, como su expresidente Francisco González, así como numerosos directivos y ex directivos.

Barredo ha declarado hoy como investigado ante el titular del juzgado central de instrucción nº 6, Manuel García Castellón, en la causa sobre la relación de BBVA con empresas vinculadas al excomisario.

Se trata de la «operación Trampa», novena pieza separada del caso Villarejo, en torno a los supuestos servicios de espionaje a políticos, empresarios y periodistas que el banco habría encargado al excomisario desde 2004, momento en el que la constructora Sacyr inició, sin éxito, un movimiento para tratar de tomar el control de la entidad.

Según han explicado a Efe fuentes jurídicas, inicialmente Barredo ha asegurado que se enteró de la relación de BBVA y Cenyt, empresa vinculada al excomisario, por la prensa, aunque posteriormente, y a preguntas del fiscal, recordó que una prima suya colaboró con dicha empresa, sin ser consciente en aquel momento -2003- de que tuviera relación con Villarejo o con BBVA.

Por lo que respecta a una factura de 1,2 millones de euros, Gómez Barreda ha explicado, según las mismas fuentes, que consultó con el exjefe de Seguridad Julio Corrochano antes de abonarla, para asegurarse de que era correcta.

El ex directivo ha reiterado que la gestión de las facturas se hizo correctamente y ha indicado que, entre sus funciones, no estaba comprobar la regularidad del procedimiento de compras, como ya destacó en su testimonio el catedrático de Contabilidad de la Universidad de Navarra Germán López Espinosa.

López Espinosa es el autor de un informe pericial encargado por Barredo, en el que pone en cuestión el informe «forensic» elaborado por la consultora PwC a petición del banco.

Aunque aseguró que en ningún momento detectó finalidad de ocultación, el perito criticó con dureza el informe de PwC, en el que advirtió errores metodológicos ya que, en su opinión, partía de una premisa falsa y es que en las facturas financieras no pueden existir este tipo de servicios.

Según López Espinosa, en el informe de PwC se utilizaron afirmaciones basadas en las explicaciones de la entidad, en vez de información proporcionada por esta; además no se aportaron las entrevistas a los empleados y no se hizo un análisis de la evolución de la normativa de compras.

También ha declarado este viernes como investigado el técnico contable Gregorio Egea, que, según fuentes jurídicas, ha asegurado desconocer las facturas concretas de Cenyt que fueron a quebrantos en vez de a Seguridad en las cuentas de 2004.

Al ignorar de qué conceptos se trataba -añaden las mismas fuentes- no ha podido aclarar si eran ordinarias o extraordinarias.