El fundador de PokerStars convertirá el palacio de Miraflores en pisos premium
Mark Scheinberg, el fundador de la empresa de Poker llamada PokerStars, a través de su empresa Mohari Hospitality fundada en 2017, ha consolidado su posición como propietario del proyecto de lujo más grande de Madrid, Canalejas. Ahora, busca expandir su cartera con otro proyecto exclusivo: el Palacio de Miraflores. Adquirido apenas cinco meses después de Canalejas, este activo, previamente en manos de Blackstone, está siendo transformado por el empresario para convertirse en otro ícono del lujo en Madrid.
Mohari Hospitality tiene la intención de iniciar los trámites administrativos para cambiar el uso del Palacio de Miraflores, actualmente destinado a oficinas, como parte de su plan para este nuevo desarrollo.
Se están considerando dos opciones para el Palacio de Miraflores: convertirlo en un hotel de lujo o en un proyecto de branded residences, es decir, residencias de alta gama con servicios asociados a una marca hotelera. La segunda opción parece ser la más prometedora según la compañía, aunque aún deben afinar los números y analizar la viabilidad. Este cambio de uso requerirá una modificación del Plan General, un proceso que tomará varios años.
PokerStars ya ha habilitado otros edificios para pisos de lujos
Mientras tanto, el edificio está actualmente arrendado a la firma de coworking Spaces, con un contrato a largo plazo que finaliza en junio de 2027. Durante este período, Mohari Hospitality continuará maximizando los ingresos a través del coworking y gestionará la transición hacia el nuevo uso del inmueble.
De hecho, recientemente, la compañía ha habilitado la planta 4 del edificio, que estaba vacía, para organizar seminarios y eventos y destina cada año una cantdiad bastante elevada de inversión para mantener el activo en las mejores condiciones, ya que se trata de un edificio protegido.
Con casi 7.200 m2 sobre rasante y otros 3.000 m2 bajo rasante, el Palacio de Miraflores podría transformarse en unos años en unas 26 unidades residenciales de lujo, según calculan los expertos del sector consultados por este medio, que apunta que los planes del dueño del activo pasan por destinar la planta baja a espacios comunes y servicios exclusivos.