Los peritos del Banco de España consideran ‘un éxito’ la ampliación de capital del Popular en 2012
Los peritos del Banco de España designados por el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz para analizar si hubo un presunto delito de estafa en la ampliación de capital llevada a cabo por el Banco Popular en 2012 han entregado al magistrado un informe que concluye que la operación fue «un éxito».
El documento de 210 páginas al que ha tenido acceso EFE, que fue elaborado por los técnicos tras la petición efectuada por el juez en septiembre de 2022, analiza los activos adjudicados del banco, la adquisición del Banco Pastor, los recursos propios, el folleto de emisión de la ampliación de capital y si hubo o no perjuicio para los inversores.
En la causa figuran como investigados el expresidente del Banco Popular Ángel Ron; el exvicepresidente de la entidad Roberto Higuera, y el auditor de PwC que revisó las cuentas de 2012 del banco José María Sanz Oliva.
Entre las conclusiones más relevantes de los expertos del Banco de España destaca que «es un hecho que la ampliación de capital fue un éxito, ya que se suscribió por completo en el plazo previsto e incluso hubo sobredemanda de títulos».
La evolución de la acción del Popular tras la ampliación muestra que la operación era beneficiosa para los accionistas, según los peritos del Banco de España
La evolución del valor de la acción en los meses posteriores muestra que, en general, los inversores consideraron la operación muy beneficiosa, produciéndose desde muy pronto revalorizaciones relevantes de la acción, incluso por encima de la media del mercado, añade el documento.
A esta mejora de la imagen del banco contribuyó, sin duda, que se lograran, «en gran medida», los objetivos previstos, entre otros la mejora de las ratios de cobertura de riesgos y adjudicados, y dejar al banco en una posición saneada que le permitía obtener mejor rentabilidad, algo que veían con buenos ojos los inversores, prosiguen los expertos.
Con independencia de la rentabilidad que obtuviera cada uno de los inversores, fruto de sus decisiones privadas de inversión, «acudir a la ampliación de capital fue una buena inversión».
Por lo que respecta al folleto, los expertos matizan que la información facilitada sobre el plan de negocio fue «escasa», y se limitó a explicar «sucintamente» los resultados esperados en el trienio 2012-2014, sin incluir una cuenta de resultados completa y sin aportar detalles sobre «hipótesis o variables macroeconómicas en los que se basaba el plan, ni sobre la cobertura de la morosidad».
Informe al Banco de España, pero no a los inversores
De todo ello sí se informó al Banco de España, pero no a los inversores.
No obstante, los peritos admiten que las cuentas anuales de 2011 y 2012 del Popular «no cumplían con el marco contable del Banco de España en lo relativo a la clasificación contable de las operaciones crediticias y su cobertura», algo que los expertos atribuyen al efecto de la crisis de 2008.
Las reclasificaciones a dudosos de 2012 fueron muy superiores a lo esperado, indican los peritos, y ya que esas previsiones se hicieron a finales de año, «hubiéramos esperado un mayor grado de acierto en la previsión»; una parte de dichas reclasificaciones, señala el documento, se hizo ya en 2013.
Pese a todo, el informe reitera que el Popular cumplió «con todos y cada uno de los requerimientos legales de capital durante el periodo analizado, 2011 y 2012».
Además de las querellas que investiga el juez Santiago Pedraz, el titular del juzgado central de Instrucción número 4, José Luis Calama, investiga desde 2017 a los dos últimos equipos gestores del Popular, liderados por Ángel Ron y su sucesor al frente de la entidad Emilio Saracho, por presuntos delitos societarios.
Calama abrió entonces dos piezas separadas, una que investiga al equipo de Ron por la ampliación de capital de 2016, y una segunda sobre los 108 días de mandato de Saracho, que se centra en un posible delito de manipulación del mercado con noticias falsas para hacer caer el valor de la cotización.