Fitch mantiene la deuda espaƱola en aprobado alto pese a los mayores riesgos
Madrid, 29 ene.- La agencia de calificación de riesgos Fitch ha mantenido hoy la calificación de la deuda soberana espaƱola en aprobado alto con perspectiva estable (BBB ), al asumir que la mayor Ā«incertidumbre polĆticaĀ» no harĆ” Ā«descarrilarĀ» el crecimiento económico y que CataluƱa seguirĆ” perteneciendo a EspaƱa.
En su revisión de la nota espaƱola, la agencia resalta, no obstante, el riesgo de que se debiliten las dinĆ”micas de reformas y consolidación fiscal al haberse incrementado, tras las elecciones del 20 de diciembre, la posibilidad de un gobierno apoyado por elementos polĆticos Ā«mĆ”s radicalesĀ».
Por ello consideran que, desde su última revisión en octubre, los riesgos de un periodo de incertidumbre prolongado o de un gobierno inestable se han elevado.
Según Fitch, la composición del próximo ejecutivo sigue siendo incierta, con varias posibilidades abiertas, incluidas unas nuevas elecciones.
En cuanto a la situación en CataluƱa, su escenario base es que habrĆ” un acuerdo entre Madrid y Barcelona para acometer reformas regionales y para una mayor autonomĆa de CataluƱa dentro de EspaƱa.
A pesar de que recuerdan que una independencia completa de Cataluña no es posible según la constitución española, destacan que «los recientes acontecimientos subrayan nuestra visión de que serÔ un proceso desafiante».
A su juicio, la decisión del parlamento catalĆ”n de iniciar un proceso de independencia, que fue confirmado por el nuevo presidente catalĆ”n, Carles Puigdemont, recuerdan, aƱadió incertidumbre polĆtica.
Ā«La incertidumbre en torno a las futuras relaciones entre CataluƱa y el resto de EspaƱa podrĆa daƱar la confianza económica y la inversiónĀ», recalca la agencia, para la cual la independencia tendrĆa un impacto negativo en la deuda espaƱola.
En todo caso, Fitch asume a la hora de evaluar la calidad crediticia del paĆs que lo que existe es una presión para una mayor autonomĆa catalana, perspectivas de acuerdo y una potencial deslocalización financiera durante la transición hacia un nuevo pacto.
AdemĆ”s, segĆŗn Fitch, tanto el paĆs como la eurozona lograrĆ”n evitar una deflación duradera, con ayuda, entre otros, del programa de compra de activos del Banco Central Europeo (BCE), si bien el riesgo de deflación podrĆa intensificarse en caso de nuevos Ā«shockĀ» económicos, alertan.
La tercera suposición que esgrime la agencia en su anĆ”lisis para mantener la nota espaƱola es que las actuales polĆticas para el equilibrio fiscal se mantendrĆ”n en su mayor parte, con un posible superĆ”vit primario del 0,1 % del Producto Interior Bruto (PIB) en 2017.
Para la agencia, EspaƱa se estĆ” beneficiando de un fuerte crecimiento cĆclico, con un crecimiento del PIB del 3,2 % en 2015 -asĆ lo ha adelantado hoy el Instituto Nacional de EstadĆstica (INE)-, el mayor entre las mayores economĆas de la eurozona.
Los motivos los encuentra Fitch en la demanda doméstica y un mercado de trabajo cada vez mÔs fuerte, a pesar de un alto nivel de desempleo, asà como en la confianza de los consumidores, los bajos precios del petróleo y la mayor facilidad para el crédito.
Según la agencia, el crecimiento del PIB español serÔ del 2,6 % en 2016 y 2.3 % en 2017.
En cuanto al dĆ©ficit pĆŗblico, calculan que serĆ” del 3,5 % en 2016 y del 2,9 % en 2017, con una deuda pĆŗblica que llegarĆ” al 100,2 % del PIB este aƱo (frente a la media del 42,7 % de otros paĆses calificados con aprobado o BBB).
A su vez, el sector financiero, para Fitch, ha continuado su recuperación, con ayuda del fuerte crecimiento económico y de la estabilización de los precios de la vivienda.
Fitch se muestra dispuesta a mejorar la deuda española si se reduce el déficit y la deuda pública, si mejora de la balanza de pagos o si hay mayor confianza en un crecimiento sostenido, sin crear desequilibrios macroeconómicos, y apoyado en reformas estructurales.
Por el contrario, advierte de que un periodo prolongado de incertidumbre polĆtica, un gobierno inestable o un crecimiento de las tensiones entre Madrid y CataluƱa podrĆan suponer una revisión a la baja de la nota de la deuda soberana. EFE