La IA en el sector sanitario requiere de una regulación ética y clara que no frene la innovación
Tras los últimos avances y desarrollos en el sector sanitario, la inteligencia artificial (IA) se presenta hoy más que nunca como una herramienta innovadora e integrada en la investigación y el cuidado asistencial. Actualmente, más del 40% de los hospitales europeos ya están implementando herramientas de IA para el diagnóstico de enfermedades como el cáncer, mejorando la precisión y la rapidez de los tratamientos. En este sentido, “la IA está revolucionando el sector sanitario y, por eso, es necesario entender el impacto de la misma y aprender a convivir con ella. Aunque la IA tiene un gran potencial para transformar el sistema de salud, es crucial garantizar un enfoque ético y regulado que proteja la privacidad de los pacientes y fomente la confianza en estas nuevas tecnologías para poder garantizar una mejor atención asistencial”; así lo ha señalado Marta Villanueva, directora del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Fundación IDIS), en la apertura de la jornada “TendencIAs y regulación en Inteligencia Artificial”, desarrollada en el marco del foro IDIálogoS y en la que se ha abordado el imparable avance de la inteligencia artificial aplicado a la gestión de los sistemas de salud, al uso de los datos y las imágenes y a la medicina de precisión, entre otros.
Daniel Hidalgo, Managing Director Health&Public Service for Data&AI de Accenture; Antonio Ibarra, director de innovación de Grünenthal y presidente de AIMFA (Agrupación de Investigación y Marketing Farmacéutico) e Íñigo de Miguel, investigador de la Cátedra de Derecho y Genoma Humano en la Universidad del País Vasco y vocal 2º de la Asociación Española de Derecho Sanitario, han constituido la mesa de debate, en la que se destacó que las entidades tienen que interiorizar que el dato es el canalizador sobre el que se han de construir los diferentes aplicaciones y servicios. A día de hoy, son muchas las organizaciones y grupos hospitalarios que están invirtiendo en inteligencia artificial para mejorar los diagnósticos médicos o interpretar imágenes para detectar enfermedades con mayor precisión, entre otros aspectos. A modo de ejemplo, se ha puesto de manifiesto que las ciencias de la salud y en el desarrollo de medicamentos, en particular, son quizás las áreas en las que la inteligencia artificial está teniendo un mayor impacto.
Los expertos señalaron la importancia de incorporar principios éticos y regulatorios en el diseño de soluciones de IA, alineándose con normativas de protección de datos y privacidad. Además, destacaron la necesidad de colaborar con reguladores y expertos en ciberseguridad para crear sistemas transparentes, escalables y flexibles, que fomenten la innovación y cumplan con las normativas. En este contexto, es esencial que a la hora de aplicar el reglamento de la Inteligencia Artificial y el del Espacio Europeo de Datos Sanitarios se contemplen los casos de uso y analizar los posibles riesgos. Por ello, los profesionales reunidos en la sesión apuestan decididamente por informar de forma global y explicar a la ciudadanía qué datos se usan, cuándo y cómo se garantiza la privacidad de los mismos tanto en el uso primario (con fines asistenciales) y secundario de los datos (con fines de investigación).
Por último, han coincidido en señalar que la inteligencia artificial representa una oportunidad única para que el sector salud lidere una transformación significativa impulsada por esta tecnología. Subrayaron que, al aprovechar todo el potencial de la IA, el sistema sanitario puede mejorar de manera sustancial la precisión en los diagnósticos, optimizar tratamientos personalizados y acelerar los tiempos de respuesta en el cuidado de los pacientes. Sin embargo, insistieron en la importancia de una coordinación efectiva entre todos los actores clave: desde los hospitales y centros de investigación hasta la Administración. Esta colaboración es esencial para asegurar que el desarrollo e implementación de la IA se enfoque en la mejora de la calidad de vida y los resultados de salud de las personas.