La petrolera estadounidense Chevron ha anunciado que recortará entre un 15 % y un 20 % de su personal, mientras la finlandesa Neste despedirá unos 600 empleados -el 11 % de su plantilla-. Ambas petroleras han sufrido un fuerte recorte de beneficios en 2024. La española Repsol publicará resultados el próximo día 20 de febrero.
Este plan de recortes comenzará este 2025 y finalizará a finales de 2026, pero la compañía asegura que tendrá cierto «impacto residual» a partir de 2027, según aseguró la petrolera en un comunicado.
«Chevron está tomando medidas para simplificar nuestra estructura organizacional, ejecutar con mayor rapidez y eficacia y posicionar a la empresa para una competitividad más fuerte a largo plazo», aseguró el vicepresidente de la empresa, Mark Nelson, en el comunicado.
Nelson insistió en que desde la empresa no se toman estas medidas «a la ligera» y que apoyarán a sus empleados durante el proceso de despido.
«Un liderazgo responsable exige tomar estas medidas para mejorar la competitividad a largo plazo de nuestra empresa para nuestra gente, nuestros accionistas y nuestras comunidades».
A finales de 2023, la compañía empleaba a más de 45.000 personas y ya entonces manifestó sus previsiones de recortes en la plantilla para los próximos dos años, según recoge el diario The New York Times (NYT).
A las 14:00 (EST), las acciones de Chevron bajaban un 1,46 % en la bolsa.
Los resultados trimestrales de la petrolera, que se publicaron recientemente, no alcanzaron las expectativas de los analistas. La compañía ganó un acumulado 17.661 millones de dólares en 2024, un 17,3 % menos que en el ejercicio inmediatamente anterior.
Las petroleras Chevron y Neste anuncia recortes de su plantillas del 20% y el 11%, respectivamente
La compañía petrolera finlandesa Neste anunció este jueves el despido de unos 600 empleados -el 11 % de su plantilla- tras registrar unas pérdidas netas de 95 millones de euros en 2024, frente a los 1.436 millones de beneficio del año anterior, algo que está siendo habitual entre todas las petroleras que están presentando resultados.
«Nuestro rendimiento financiero actual es débil y no es sostenible. Por tanto, debemos tomar medidas urgentes para reajustar varias partes de nuestra empresa», afirmó en un comunicado Heikki Malinen, consejero delegado de Neste.
La petrolera finlandesa facturó 20.635 millones de euros en 2024, un 10 % menos interanual, debido sobre todo a la caída de los precios de los carburantes, que recortaron los ingresos en unos 1.600 millones, según la empresa.
A esto se sumó el descenso del volumen de ventas de combustibles fósiles por las obras de mantenimiento en su refinería de Porvoo (Finlandia), que tuvo un impacto negativo en la facturación total de 1.400 millones de euros.
El beneficio bruto de explotación (ebitda) de Neste se redujo un 60 % interanual, hasta los 1.005 millones de euros, mientras que su ganancia operativa se situó en 95 millones tras desplomarse un 98,5 %.
Cae el negocio de derivados de petróleo de Neste
Su negocio de derivados del petróleo, el más importante por ingresos, facturó 11.829 millones de euros, un 11 % menos interanual, lastrado por el descenso de las ventas de gasolina y diésel, que disminuyeron un 14,6 %, hasta los 10,14 millones de toneladas.
Al menor volumen se sumó el desplome del margen de refino, que pasó de 21,1 a 14,1 dólares por barril, lo que provocó que el beneficio operativo de esta división se recortase un 68 % interanual, hasta los 345 millones de euros.
Su negocio de carburantes renovables, el segundo en importancia, también registró una disminución de sus ingresos, pese a aumentar el volumen de ventas, y facturó 7.321 millones de euros, un 13,5 % menos.
Esta división registró una pérdida operativa de 347 millones de euros, después de que su margen cayera un 56 % y se situara en 377 dólares por tonelada.
Neste colocó en el mercado 3,73 millones de toneladas de biocombustibles, un 10,3 % más que el año anterior, principalmente biodiésel producido en sus plantas de Porvoo (Finlandia), Róterdam (Holanda) y Singapur.
El 51 % de estos carburantes renovables los comercializó en Europa y el resto lo vendió a clientes de Norteamérica, región que ha aumentado su cuota en la compra de biocombustibles de Neste desde el 39 % al 49 % en el último año entre las petroleras.
