El vicepresidente no ejecutivo de Talgo José María Oriol Fabra ha presentado su dimisión como miembro del consejo de administración de la compañía, con efectos inmediatos, según ha informado la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) este viernes.
Según recoge el comunicado remitido por el fabricante de trenes a la CNMV, el consejero ha manifestado que su renuncia se debe a motivos personales.
Oriol Fabra se incorporó a Talgo en 1987 y desde entonces se ha involucrado en el grupo asumiendo diferentes posiciones, entre otras, la de responsable de subcontratación, director financiero y director general de diferentes filiales de Talgo, según recoge su currículo en la web de Talgo.
Esta dimisión se produce el día que concluye el plazo dado por Trilantic para recibir ofertas por la participación en Talgo y en un momento en el que la formuladas por Sidenor se perfila como la única oferta posible, ante las fuertes presiones recibidas desde el Gobierno español, que no ha dudado en vetar mejores ofertas económicas para los accionistas, para que sea Sidenor el nuevo socio de referencia de Talgo.
La oferta de Sidenor, que cuenta con el apoyo político del Gobierno español y vasco, es la más pobre de todas para los accionista de Talgo
La sociedad Clerbil (del presidente de Sidenor, José Antonio Jainaga,) acompañada del fondo público vasco Finkatuz y de las fundaciones de BBK y Vital, aspiran a controlar el 29,77 % de Talgo. El precio ofrecido es de 4,15 euros, que ni siquiera en el mejor de los casos, 4,80 euros cumpliendo objetivos de largo plazo, se acerca a los 5 euros que en su día ofreció Ganz Mavag por el 100% del capital, la misma cantidad que estaban dispuestos a pagar el fondo polaco PFR o la empresa indica PFR.
El Gobierno español ha mostrado su apoyo a Sidenor desde el comienzo de las negociaciones para entrar el accionariado de Talgo y ha frenado la opa anunciada por el fondo polaco PFR y con la india Jupiter Wagons también en retirada.
Un apoyo que también ha llegado desde el Gobierno vasco, el diputado general de Álava, Ramiro González, destacó el jueves la «tremenda importancia» que tendría la compra de Talgo por parte de Sidenor, dado que supondría la vuelta del domicilio fiscal de la compañía ferroviaria al territorio alavés, «del que nunca debió salir», y consolidar el proyecto y el empleo.
Estos movimientos se han notado en la acción de Talgo, que cerró la víspera con una caída del 9,28 %, hasta 3,91 euros por acción.
Este viernes los títulos de Talgo cotizan a las 9:30 de la mañana con un retroceso del 1,02 % hasta los 3,87 euros por acción.
Asimismo, los consejeros de Talgo Javier Bañón y Javier Olascoaga (socios de Trilantic, que controla el 29,8 % del capital), así como el consejero en representación de Torreal, Pedro Manuel del Corro, presentaron el pasado martes su dimisión irrevocable como miembros del consejo de administración con efectos inmediatos.