El fabricante de bienes de equipo Duro Felguera ha decidido aplicar un tratamiento contable «más conservador» al contrato de la central de ciclo combinado (de gas) de Djelfa (Argelia), actualmente en litigio, lo que implica la dotación de una provisión de unos 100 millones euros, frente a los 413 millones que le reclama Sonelgaz.
Según ha comunicado la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), esta dotación obligará a reexpresar las cuentas anuales de los ejercicios 2022 y 2023, y a reformular los estados financieros del primer semestre de 2024; aunque el patrimonio neto de la sociedad se mantendrá «positivo a efectos mercantiles».
Duro Felguera prevé completar estos cambios la próxima semana. El consejo de administración de la compañía se reunirá también la próxima semana para aprobar los estados financieros intermedios de 2024 de acuerdo con los criterios señalados.
Este cambio de criterio sobre el tratamiento contable del proyecto de Djelfa parte del escenario de una ejecución completa de las obras sin ningún tipo de reequilibrio económico por parte del cliente, y del «importe máximo de penalidad por el retraso que se encuentra en disputa desde el ejercicio 2021».
La empresa ha recalcado que seguirá defendiendo sus planteamientos sobre el proyecto de Djelfa por la vía judicial y arbitral, aunque también llevará a cabo «todas las actuaciones necesarias» para tratar de conseguir una solución negociada beneficiosa para la sociedad.
Sonelgaz reclama a Duro Felguera 413 millones de euros
La compañía energética argelina Sonelgaz Production d’Electricité (SPE) ha solicitado un arbitraje en torno al contrato de Djelfa en el que reclama a Duro Felguera una indemnización de 413 millones de euros.
En sentido contrario, la empresa asturiana ha avanzado que planteará su oposición y solicitará otras cantidades «por los daños y perjuicios ocasionados».
El fabricante de bienes de equipo presentará su escrito de oposición a la solicitud de arbitraje antes del próximo 10 de diciembre, «rechazando la reclamación» de Sonelgaz al entender que la «suspensión del contrato por parte de Duro Felguera es conforme a derecho por los incumplimientos en que ha incurrido».
La solicitud de arbitraje por parte de Sonelgaz se produce después de que Duro Felguera anunciara el pasado mes de junio la suspensión de los trabajos de la central de ciclo combinado de Djelfa, en Argelia, un contrato firmado en 2014 por 544 millones de euros.
Suspensión del contrato
La empresa española anunció la suspensión del contrato «ante la necesidad de ajustarlo a la realidad concurrente, alterada sustancialmente desde su origen por causas no imputables a Duro Felguera y tras múltiples intentos de solución», y avanzó que promovería «las actuaciones necesarias para alcanzar una solución definitiva para todas las partes».
Duro Felguera formalizó el contrato para la construcción de la central con la empresa Societé de Production de l’Electricité, filial de Sonelgaz, en febrero de 2014.
El contrato, que fijaba un plazo de ejecución de 40 meses, proyectaba una central con cuatro turbinas de gas y dos de vapor, con una potencia de generación de 1.500 megavatios.
Duro Felguera había informado en 2021 de la reactivación de su ejecución «bajo un marco de acuerdo con el cliente con positivas expectativas para una finalización exitosa de dicho proyecto».
