Telefónica celebra su centenario tocando la campana de cierre en Wall Street

La compañía española Telefónica, que acaba de cumplir 100 años, celebró este miércoles su aniversario con el toque de campana de cierre en la Bolsa de Nueva York, que protagonizó su director ejecutivo, José María Álvarez-Pallete, rodeado de varios directivos desplazados para la ocasión a Wall Street.

Previo a este momento, altamente simbólico y que la bolsa de Nueva York (NYSE) retransmite en directo en sus canales, Álvarez-Pallete dio un discurso en la sede bursátil, en el corazón financiero de Manhattan, donde recordó que la historia de Telefónica en su siglo de vida «es la de la constante transformación y anticipación con un foco muy claro en la innovación y la tecnología».

Convertida hoy «en una de las mayores ‘telecos’ del mundo -tiene 388 millones de clientes en Europa y América-, el ejecutivo español, que tomó sus riendas en 2017, destacó que la empresa, como la histórica bolsa neoyorquina, «capaz de transformarse y hacerse útil a la sociedad».

Telefónica se registró en la Bolsa de Nueva York hace ahora 37 años, siendo la primera compañía española en hacerlo, aunque a través de una ADR

Álvarez-Pallete recordó que la compañía no habría logrado superar con éxito su centenario si no tuviera claro un propósito, que en su caso es «hacer el mundo más humano conectando las vidas de las personas», llevando la tecnología a todas partes «y sin dejar a nadie atrás».

Todo ello gracias -recalcó- a queTelefónica «creaba valor para sus accionistas, así como para la sociedad en su conjunto».

Aunque Telefónica se registró en la Bolsa de Nueva York hace ahora 37 años, siendo la primera compañía española en hacerlo, no cotiza en ella directamente, sino a través de una ADR (certificados de depósito), lo que le ha restado visibilidad en el exigente mercado estadounidense, en contraste con el peso y la imagen de que goza en los principales países de Latinoamérica.

En el curso de su viaje a Nueva York, Álvarez-Pallete recibió ayer martes la medalla que cada año concede la Sociedad de las Américas a alguno de los empresarios más prominentes del mercado latinoamericano, galardón que compartió con el CEO del Grupo mexicano Coppel, Agustín Coppel Luken.