El pasado mes de enero, un juzgado de Zaragoza ratificó la sanción de más de ocho mil euros que le impuso la Seguridad Social al secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, por la contratación irregular de su asistente personal. La defensa que ha hecho aún fue peor.Echenique mostró su discrepancia con esta resolución judicial, ya que según ha explicó en Twitter la ley de dependencia estatal y la aragonesa dice que “los asistentes profesionales pueden funcionar como autónomos”, lo que no haría obligatoria su alta en la Seguridad Social, es decir, tiene a alguien trabajando si pagarle la Seguridad Social y como falso autónomo.
No es la primera vez que alguien de Podemos se aferra a la ley para justificar los injustificable como en la caso de los despedidos la indemnización mínima de 20 días por año trabajado.
El documento ético aprobado en la última asamblea ciudadana de Vistalegre II establece que todos sus cargos públicos, internos o candidatos de Podemos tienen el compromiso de renunciar a su puesto “en caso de ser procesado o condenado” por delitos de corrupción, económicos, acoso sexual, violencias machistas, pederastia y el maltrato infantil, así como los delitos contra los derechos de los trabajadores y las trabajadoras, los ecológicos y los urbanísticos. Mucha palabrería y poco fundamento, como demuestran los hechos.