¿Fin del rally?
A pesar de la virulencia de la pandemia, muchos simplemente asumen que acabará en algún momento de 2021 sin pararse en ningún momento a algo de tiempo para reflexionar porque siendo realistas parece que esas esperanzas están fuera de lugar. El control de la pandemia implica liderazgo, coordinación, logística y solidaridad y a fecha de hoy la mayoría de países están fallando, al menos en los tres primeros. Lo más probable es que el invierno venga acompañado de un fuerte incremento de infecciones y de muertes y eso es lo que están poniendo en precio los mercados estos días. Nadie debería estar sorprendido, por otro lado, de que esto esté sucediendo de nuevo puesto que el mercado estará durante mucho tiempo especialmente sensible a las noticias sobre las vacunas y la pandemia pero fundamentalmente, atento a las malas noticias.
Los primeros días de enero son siempre la mar de interesantes por aquello del efecto enero en los mercados y hemos tenido los primeros baches y sustos. Lo suficiente para ponernos de nuevo en alerta y asumir que el efecto enero, las vacunas, el acuerdo para el Brexit, el cambio de administración en EE.UU, las garantías de nuevos estímulos o los mayores beneficios empresariales que se esperan son argumentos muy poderosos para seguir apostando por el rally pero que el virus seguirá ahí por mucho tiempo.
Han bastado un par de sesiones y que Inglaterra haya cerrado el país a cal y canto y confinado a su población para que se hayan disparado los niveles de Orfidal en los despachos de los gestores y en las mesas de operaciones de los traders y los inversores particulares. Dice mi amigo Javier que esa es una poderosa razón para poner su dinero siempre en manos de una máquina o un gestor automatizado porque no toman sustancias para venirse arriba en los momentos de abatimiento o para bajar el subidón que nos ha brindado el más veloz y también el mayor rally en la historia de la bolsa. Feliz semana.