El crecimiento económico se está ralentizando

El «Global Wealth Report», recogido en una publicación de la empresa Allianz, arroja datos interesantes sobre el crecimiento de la riqueza en todo el mundo.
En el 2015 los valores patrimoniales particulares –en el Estrado- han bajado un 3,2% en Europa Occidental, mientras que en los USA fue de 2,4%. Es decir, la cuota de crecimiento económico, respecto al 2014, se redujo a la mitad. En cambio en el Asia –sin Japón- hubo en el 2015 un crecimiento del 14,8%.
El patrimonio global de dinero del sector particular también se ha reducido a un crecimiento de 4,9%, alcanzando la cota de 155 trillones de Euros. Pero tres anos atrás, este índice de incremento anual ha sido de una media del 9%. Hispanoamérica y Europa Oriental manifiestan en cambio un crecimiento muy inferior, aprox. sólo la mitad del índice global. De los 155 trillones, el 18,5% recae sobre Asia –sin Japón-, triplicando su patrimonio por tres desde el ano 2000.
Según la fuente citada arriba, en USA y Europa Occidental el endeudamiento ha crecido en el 2015 moderadamente un 4,5%, lo cual indica que los particulares y las empresas ponen cuidado en no endeudarse excesivamente, aún cuando los tipos de interés estén casi a cero. Y esto hasta el punto de que en muchos países de Europa Occidental ha continuado el proceso de reducción de deudas. A finales del 2015, las deudas privadas –sin los Estados– han llegado a la cota de 38,6 trillones de euros.

Los grandes maestros son las multinacionales, que tienen la posibilidad de mover su producción de una nación a otra a precios que responden a criterios de ahorro fiscal

Da la impresión de que muchos –en el sector no estatal- han aprendido las lecciones que fueron dando tantas burbujas financieras que, al explotar, se llevan por delante, como un tsunami, todo lo que está por delante. Pero parece como si los Estados aprovechasen esto mismo para endeudarse más y más, lo cual está provocando repercusiones inaceptables en el mercado financiero, concretadas en todo tipo de Leyes y Reglamentos que distorsionan totalmente el mercado del dinero. Lo bueno es que este juego es bien conocido por todos y lleva, lógicamente, a la paulatina pérdida de confianza en la gestión pública del Estado, que se sigue considerando falsamente «inquebrable».
Incluso la relación Estado-ciudadano esta cada vez más marcado por una actitud autoritaria dentro de una organización excesivamente burocrática. Por esto y por muchas otras razones –por ejemplo, la corrupción- las empresas consideran que tienen un derecho moral para pagar los menos impuestos posibles, aunque sea a precio de trasladarlas a sitios de coste fiscal más bajo o a acogerse a arquitecturas societarias que de una forma legal pueden bajar los impuestos sustancialmente. En esto, los grandes maestros son las multinacionales, que tienen la posibilidad de mover su producción de una nación a otra a precios que responden a criterios de ahorro fiscal. A quien desapruebe esta estrategia de supervivencia empresarial hay que decirle que eso es mejor que el cierre de la empresa, dejando en la calle a miles de empleados.