El banco holandés ING, que cuenta con filial en España, obtuvo un beneficio neto de 6.392 millones de euros en 2024, un 12,3 % menos que el año anterior pero aún así el segundo mejor resultado anual jamás registrado por la entidad, según informó la empresa este jueves.
Los ingresos aumentaron ligeramente con respecto a 2023, hasta los 22.615 millones de euros, «alcanzando un nuevo récord», gracias a un aumento del 11 % en los ingresos por tasas y comisiones, hasta los 3.595 millones de euros, mientras que los ingresos por intereses se redujeron un 6,0 %, hasta los 15.976 millones, indicó el banco.
Los préstamos al consumo aumentaron un 5,9 % en 2024, hasta los 686.100 millones de euros, y los depósitos un 6,4 % , hasta los 691.700 millones.
El incremento del crédito estuvo motivado en particular por la ampliación de la cartera de hipotecas de la entidad, sumado al incremento de los préstamos a empresas y particulares, mientras que en el segmento de banca mayorista el crecimiento estuvo más «limitado» por las operaciones de optimización de capital, según la compañía.
En el caso de los depósitos, la entidad señaló que «tuvo éxito en atraer nuevas depósitos» tanto en el segmento minorista, dónde hubo una entrada neta particularmente en Países Bajos, Polonia y España, como en el de banca mayorista.
La rentabilidad de ING baja del 14,8% al 13%
La rentabilidad por fondos propios (RoE) de la entidad, principal indicador de la rentabilidad, bajó del 14,8 % en 2023 al 13 % en 2024, en tanto que el ratio de capital de máxima calidad (CET 1) pasó del 14,7 % al 13,6 %.
«Hemos registrado un resultado neto de 6.400 millones de euros, manteniendo un nivel alto tras un 2023 muy fuerte (…) Para el año que viene, seguiremos vigilantes puesto que prevemos una continuada volatilidad geopolítica y unas perspectivas económicas fragmentadas», dijo el consejero delegado de la entidad, Steven van Rijswijk, en un comunicado.
Para 2025, la entidad prevé que los ingresos se mantengan en torno al mismo nivel que en 2024, ya que espera un aumento de los volúmenes y tiene un objetivo de aumento de los ingresos por intereses de entre el 5 y el 10 %, pero también prevé una subida de los costes en el entorno de los 12.500 millones de euros.
Asimismo, espera que la rentabilidad por fondos propios se sitúe todavía por encima del 12 % y que el ratio de capital CET1 converja hacia su objetivo del 12,5 %.
Estas proyecciones excluyen el impacto de la venta del negocio de ING en Rusia, que la entidad calcula tendrá un impacto de unos 700 millones de euros después de impuestos.