Credit Suisse, condenada a pagar 926 millones de dólares al exprimer ministro de Georgia

Un tribunal de Singapur ordenó este viernes a una filial isleña de Credit Suisse pagar 926 millones de dólares en compensación por fraude al multimillonario y exprimer ministro de Georgia Bidzina Ivanishvili, el último golpe a la entidad antes de su inminente absorción por parte de UBS.

Un dictamen emitido hoy por la Corte Comercial Internacional de Singapur, divulgado en su web, considera que, «desafortunadamente, el banco tenía entre sus empleados a un estafador, Patrice Lescaudro, quien como manager del fondo (de Ivanishvili) durante nueve años malversó millones de dólares del mismo».

El caso se remonta a 2006, cuando Lescaudro empezó a gestionar un fondo fiduciario del georgiano en Credit Suisse Trust Limited, subsidiaria en Singapur del banco, momento a partir del cual «malversó dinero, compró bonos por encima del precio del mercado, y transfirió dinero entre las cuentas de su cliente y de otros para camuflar sus actividades», indica el fallo.

El dictamen añade que la «conducta fraudulenta concluyó en 2015 (…) con las consecuencias inevitables del arresto y prisión (de Lescaudro)», quien se suicidó en 2020 tras su liberación, según el diario Financial Times.

La corte de la ciudad-Estado asiática ordena a Credit Suisse Trust Limited indemnizar a Ivanishvili con 926 millones de dólares, menos 79 millones de dólares que ya transferidos.

La suma podrá recalcularse «para que no haya doble compensación», según el tribunal, pues Ivanishvili ya ganó un caso contra el banco suizo en Bermudas el pasado año, que fijó un pago al georgiano de 607,5 millones de dólares.

Credit Suisse se defiende de las acusaciones

En respuesta, Credit Suisse afirmó este viernes que el dictamen «es erróneo y tiene implicaciones legales. Credit Suisse Trust Limited pretende defender vigorosamente una apelación», según un comunicado enviado a EFE.

Se trata de un nuevo envite para el banco, golpeado por escándalos de reputación, absorbido por UBS, tras la aprobación la víspera de la adquisición por parte de la Comisión Europea.

El banco suizo UBS accedió a comprar su competidor Credit Suisse a mediados de marzo después de que el segundo, pocos días después de las turbulencias entre bancos regionales en Estados Unidos, se viera envuelto en una crisis de confianza que hundió su cotización en el mercado.

UBS pagó 3.000 millones de francos (3.050 millones de euros) por el banco para salvarlo de la quiebra, confiando en poder cerrar la operación a finales de este mayo o en junio.