Los pequeños ahorradores compraron el 34% de las Letras del Tesoro en 2023
Los pequeños ahorradores españoles acumulaban una inversión de 24.428 millones de euros en letras del Tesoro al cierre del pasado ejercicio, un 1,9 % más que en noviembre pero trece veces más que en diciembre de 2022, lo que supone un 34% de todas las Letras del Tesoro de 2023, según los datos publicados este jueves por el Banco de España.
A su vez, la inversión de los hogares o de los pequeños ahorradores en las letras del Tesoro pasó de 1.826 millones al cierre de 2022 a 24.428 millones en el último mes de 2023. En especial, sólo en el mes de diciembre, la cifra de compras de letras del Tesoro aumentó en 451 millones.
Por otro lado, la inversión de los hogares representa ya el 34 % del saldo total de letras del Tesoro en circulación, que ascendía al cierre de 2023 a 71.599 millones. Aún así, el saldo total se redujo un 0,5 % en diciembre, lo que supone unos 341 millones menos.
El aumento en el rendimiento por encima del 3% de las Letras del Tesoro generó un gran interés
Asimismo, los hogares españoles tenían invertidos 2.146 millones de euros en bonos y obligaciones del Estado al término de 2023, un 3 % más que en noviembre, cuando la cifra se situaba en 2.083 millones.
En el plazo de un año, es decir, de diciembre de 2022 a diciembre de 2023, la inversión de los hogares en bonos y obligaciones creció un 52 %.
La subasta realizada el 13 de febrero para letras a tres y nueve meses ha experimentado un aumento nuevamente, con la demanda triplicándose. Todo indica que el interés de los inversores continuará a corto plazo, al menos hasta que Christine Lagarde comience a insinuar cuándo comenzará el proceso de reducción de las tasas.
Por último, el aumento en el rendimiento por encima del 3% de las Letras generó un gran interés por parte de los particulares en 2023 para participar en las subastas, lo que llevó al Banco de España a fortalecer sus servicios y establecer un sistema de citas previas para abrir cuentas. Hasta ahora, la respuesta del sector bancario para competir con estos rendimientos ha sido limitada, lo que ha contribuido aún más a este fenómeno.