Moody’s mejora a Prisa, pero no sale del ‘bono basura’ con alto riesgo de impago
Moody’s ha decidido elevar en un escalón la calificación que confiere a la deuda del grupo Prisa, ante su «robusta» evolución operativa en los últimos tres años y su esfuerzo por reducir la deuda.
Según ha detallado la agencia de calificación este jueves, su nota pasa de Caa1 a B3, aunque la mantiene en el «grado especulativo» o de «bono basura» -con un elevado riesgo de impago-, y le confiere una perspectiva estable, en la confianza de que «seguirá teniendo un desempeño operativo sólido durante los próximos 12 a 18 meses».
Para tomar esta decisión, la agencia de calificación ha valorado que en los últimos años se haya impulsado una política financiera «más conservadora que en el pasado».
La agencia destaca específicamente que «las cuestiones de gobierno corporativo son importantes para la calificación porque la política financiera de Prisa es más conservadora que en el pasado», al tiempo que «sigue demostrando su voluntad de reducir los niveles de deuda».
Las obligaciones calificadas en B por Moddy’s, como la B3 de Prisa, son especulativas y están sujetas a un riesgo crediticio alto
Igualmente valora «las posiciones de liderazgo» de Prisa en el mercado de los medios de comunicación y la «resiliencia del negocio de educación en Latinoamérica [donde Santillana es líder]», que se ve reforzado por la «creciente contribución de los modelos de suscripción basados en sistemas digitales de aprendizaje».
Moody’s calcula sin embargo que Prisa generará un flujo de caja libre negativo de unos 20 millones de euros en 2024 y advierte de su «considerable» exposición a los mercados emergentes (lo que genera «importantes riesgos cambiarios»), de la naturaleza cíclica del gasto publicitario y su susceptibilidad a la disrupción digital, y los desafíos estructurales dentro del segmento de medios.