Portugal ultima la privatización de TAP, que interesa a IAG, Lufthansa y Air France
El Gobierno de Portugal aprobará la próxima semana la norma con las condiciones para la privatización de la aerolínea TAP, anunció este martes el primer ministro, António Costa, que aseguró que se seguirán los intereses de la compañía aérea. El grupo hispano-británico IAG -matriz de Iberia, British Airways y Vueling-, Lufthansa y Air France han manifestado interés en la privatización.
El documento será aprobado en Consejo de Ministros la próxima semana, reveló Costa durante el debate parlamentario de una moción de censura al Ejecutivo presentada por la ultraderecha, sin visos de prosperar por la mayoría absoluta socialista.
«TAP sigue siendo una empresa estratégica», dijo el primer ministro, que garantizó que se tendrán en cuenta los intereses de la aerolínea y del país para vender una parte o la totalidad de su capital.
El Gobierno no tiene intención de «venderla a cualquier privado», afirmó Costa, que recordó que la privatización estaba prevista en el plan de reestructuración acordado con la Comisión Europea.
El jefe del Gobierno destacó además que TAP ha vuelto a dar beneficios y que en el primer semestre de este año transportó a 7,6 millones de pasajeros, el 96 % de las cifras previas a la pandemia.
TAP es propiedad del Estado portugués, que tiene actualmente en sus manos el 100 % del capital tras aumentar su posición para salvarla tras los daños sufridos por la pandemia, y la aerolínea está bajo un plan de reestructuración.
TAP interesa a IAG por el mercado brasileño
El grupo hispano-británico IAG -matriz de Iberia, British Airways y Vueling-, Lufthansa y Air France han manifestado interés en la privatización.
international Airlines Group (IAG) no descarta otras operaciones de compra después de que en febrero cerrara la adquisición del 80 % de Air Europa, que, sumado al 20 % que ya tenía, le dan la titularidad del 100 % de la aerolínea de Globalia, por un importe de 500 millones de euros, aunque esta operación está a expensas de la Comisión Europea.
El consejero delegado de IAG, Luis Gallego, reconoció que el grupo tiene por delante la digestión de la compra de Air Europa, pero, al mismo tiempo, no descartó otras operaciones que puedan contribuir a fortalecer el «hub» (centro de distribución del tráfico aéreo) de Madrid-Barajas y al propio grupo.
Y en esa afirmación es donde la portuguesa TAP entra en las quinielas. El Gobierno luso ultima su privatización por la grave crisis que sufre la compañía tras su nacionalización después de haber inyectado 3.200 millones de euros a consecuencia de la covid.
TAP es atractiva no por Portugal, sino por su fuerte presencia en las rutas con Brasil, y ahí es donde IAG podría lanzar una oferta por la aerolínea en su objetivo de controlar los vuelos transatlánticos. Con British Airways controla el Norte, Canadá y Estados Unidos; con Iberia y Air Europa, toda Latinoamérica, desde México a Argentina, y con TAP pondría la guinda al paste con el mercado brasileño.
La operación no será fácil, incluso desde el Gobierno de Portugal no creen que Iberia sea el socio idóneo. Además, tendrá una fuerte competencia, porque el consorcio franco-holandés Air France-KLM también ha mostrado abiertamente su interés en TAP, sobre todo por las rutas con Brasil, y también la alemana Lufthansa.