Semana de la banca en el IBEX 35 con Sabadell, BBVA, Caixabank y Bankinter a la cabeza

El IBEX 35 ha vivido un extraña semana marcada por la reunión de la Reserva Fedeal de Estados Unidos, donde mantuvo los tipos de interés pero dejó la puerta abierta a posibles subidas antes de fin de año. De lunes a miércoles, alegría compradora entre los inversores, y de jueves a viernes, ventas.

El IBEX 35 ha cerrado el viernes con una caída de 46,9 puntos, el 0,49 %, hasta los 9.502 enteros; lo que le lleva a acabar la semana con ese retroceso del 0,5 %. En la semana, el resto de las bolsas europeas también acumuló pérdidas; París retrocedió el 2,63 %; Fráncfort, el 2,12 %; Milán, el 1,11 %; Madrid, el 0,5 % y Londres, el 0,36 %; mientras que el Eurostoxx se dejó el 2,05 % en las últimas cinco sesiones.

El resultado final para el mercado español queda en ese mínimo avance del 0,5% para el índice, que salva por la mínima los 9.500 puntos. Sin embargo, analizando el cómputo semanal algunos inversores han sacado una buena rentabilidad en el ciclo semana. Otros en cambio han perdido.

BANCO SABADELL, A LA CABEZA DEL IBEX 35

Los que más ganaron son los que apostaron por la banca. En el IBEX 35, el sector financiero encabezó las subidas semanales. El Banco Sabadell fue el valor que más repuntó, el 5 %; seguido por BBVA, el 3,55 %; Caixabank, el 3,53 % y Bankinter, el 3,01 %.

Por el contrario, los que más cayeron fueron Grifols, el 6,62 % seguido por Rovi, el 5,28 %.

Entre los grandes títulos, en la semana Telefónica subió el 2,67 %; Repsol, el 2,36 %. Por el contrario, Inditex retrocedió el 2,43 % e Iberdrola, el 0,81 %.

EL PETRÓLEO MANTIENE SU TENDENCIA AL ALZA

El petróleo continuó su escalada esta semana -llegó a superar los 95 dólares por barril de Brent- tras los anuncios de algunos países de reducir su producción unido a una mayor demanda en Asia, lo que hace que los analistas vean el precio del crudo a final de año en los 100 dólares.

La subida del crudo preocupa por su impacto en la inflación, lo que puede llevar a los bancos centrales a mantener sus tipos elevados durante más tiempo, incluso a nuevas alzas.