El banco Unicaja avanza en su proceso de transformación tras la integración con Liberbank y ha reducido de forma drástica su catálogo de productos, pasando de 1.533 a unos 200 en el último año. La entidad malagueña busca así una oferta “más clara, sencilla y adaptada a las necesidades reales del cliente”, según fuentes internas.
El plan, ya aplicado en áreas clave como hipotecas, tarjetas y préstamos al consumo, prioriza productos más intuitivos y competitivos, eliminando duplicidades y referencias poco demandadas. Además, Unicaja ha reforzado su estrategia en banca al consumo, apostando por la cercanía al cliente y una oferta simplificada como ejes de crecimiento.
Isidro Rubiales, consejero delegado de la entidad, destacó en la última junta de accionistas los avances de este plan: “Nuestra cartera se ha reducido a la décima parte, centrándonos en lo realmente importante: nuestros clientes”. La medida persigue, además de mejorar la experiencia de usuario, optimizar la eficiencia operativa y avanzar en la digitalización de procesos.
Esta estrategia forma parte del plan estratégico 2025-2027, que contempla continuar reduciendo referencias, lanzar un nuevo portal comercial y acometer inversiones tecnológicas y digitales.
Unicaja sigue así la estela de otras entidades como Banco Santander, que en el marco de su plan One Transformation ha reducido su oferta de productos de 10.100 a 5.200 entre 2022 y 2024, buscando eficiencia y simplicidad a escala global.
«Incidiremos en la transversalidad, diseñando productos y ofreciendo servicios de asesoramiento especializado de manera extendida a las pymes (…) Nos queremos acercar al día a día de las empresas y convertirnos en su banco de referencia, potenciando los productos de circulante, hasta duplicar su peso relativo en la cartera de crédito a este segmento», agregó el consejero delegado de Unicaja.