En el Radar de hoy vemos uno de los bombazos deportivos de la temporada: Bill Chisholm, socio gerente de Symphony Technology Group, se hace con los Celtics por 6100 millones de dólares. Para entender la magnitud de esta venta, es la operación deportiva más costosa de la historia. Supera por 50 millones a la compra de Washington Commanders de la NFL hecha por el co-fundador de la firma de capital privado Apollo Global Management. Dentro de la NBA, son dos mil millones de dólares más que las adquisiciones que se hicieron en 2023, con las ventas de las franquicias Phoenix Suns y Dallas Mavericks. ¿Cuáles son los planes para los próximos años?
Mal momento de los Celtics en los noventa
El negocio es redondo para el que era hasta la semana pasada el dueño de los Celtics: Wyc Grousbeck compró el equipo en 2002 por solo 360 millones. Grousbeck supo aprovechar el mal momento que atravesaba Boston, ya que la franquicia llevaba sin levantar el anillo desde 1986. Además, con la retirada de Larry Bird y de otros jugadores capitales de los ochenta como Kevin McHale, Robert Parish o Dennis Johnson, los Celtics deambularon sin rumbo durante la década de los noventa, sin mucha suerte en el draft. ¿Qué piensa Grousbeck del nuevo dueño?
¿Y qué hay de la plantilla? Ya se sabe que estas decisiones pueden generar malestar en los equipos. Ya ha quedado claro que es un gran fan de la ciudad y del equipo pero a nadie se le escapa que la NBA vive el momento más boyante de su historia. De hecho, Adam Silver, comisionado de la liga, llegó a un acuerdo con la NBC-Comcas, Amazon Prime Video y Disney para la emisión de partidos en los próximos once años. La NBA recibirá de los tres 76.000 millones de dólares.
Red Auerbach y Bill Russell, claves para la historia del equipo
Los Boston Celtics aterrizaron en la NBA en el año 1946 pero no es hasta la década de los cincuenta cuando la franquicia empieza a hacerse un nombre con la llegada del entrenador y posterior ejecutivo Red Auerbach. En el año 56 draftea al que puede ser seguramente el jugador más influyente de la historia del equipo: Bill Russell, que junto a otros jugadores como Cousy, Havlicek o Sam y K.C Jones ganaron ocho anillos consecutivos, once desde el 57 hasta el 69.
