La entidad postal Correos ha propuesto este viernes a la comisión negociadora del IV Convenio colectivo un plan de salidas voluntarias 2025–2028 para personal laboral fijo mayor de 63 años, ha comunicado a EFE una fuente cercana a la negociación.
Se trata de una de las propuestas que la dirección de Correos ha trasladado a los sindicatos en la primera reunión entre las partes, cuyo objetivo es acordar un marco general básico sobre los «temas prioritarios» de la empresa en lo que los sindicatos han denominado «operación rescate».
Los acuerdos deben quedar fijados a 31 de diciembre y se enmarcan en las «nuevas realidades dimanadas» del Plan Estratégico, pactado también con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi).
Al respecto del plan de salidas voluntarias, Correos ha planteado a los sindicatos el estableciendo de dos colectivos con condiciones diferenciadas.
El primero de ellos afectaría a los trabajadores mayores de 65 años que puedan acceder a la jubilación ordinaria, con una compensación equivalente a un año de salario limitado a una cantidad acordada.
El otro colectivo afectado sería el de los empleados con edades comprendidas entre los 63 y 65 años con contrato laboral fijo con compensaciones económicas, pensión de jubilación o compensación económica adicional percibida anualmente hasta alcanzar la edad de jubilación ordinaria, equivalente a un año de salario limitado a una cantidad acordada.
Los calendarios de salida, ha añadido la fuente informante, estarían vinculados a la implantación de medidas del resto de bloques del acuerdo que se pretende alcanzar.
Los sindicatos no quieren «trampa y cartón»
La parte sindical en la mesa de negociación está representada por CCOO, con el 38 %; UGT, con el 20 %; Csif (18 %); Sindicato Libre (15 %) y CGT (13 %).
Un portavoz de UGT ha señalado a EFE que Correos pretende con este convenio y en líneas generales rejuvenecer la plantilla, adaptar la organización al nuevo modelo de negocio e implementar un sistema de incentivos para la motivación y mejora del desempeño.
Ha precisado que la negociación debe hacerse «sin trampa ni cartón» y que los nuevos parámetros para la viabilidad de la empresa recogidos en el plan estratégico «no supongan un perjuicio en las condiciones laborales».
Para UGT, ha añadido, «son necesarias contrapartidas, una revisión de la parte retributiva para alcanzar incrementos, trabajo justo y de equidad para todo el personal en el mismo puesto de trabajo y la consideración de la salud laboral y la calidad de vida en el trabajo como eje fundamental de la gestión de recursos humanos».
La empresa postal ha declinado a EFE facilitar información sobre lo tratado en esta primera reunión de la mesa, que tendrá continuidad el próximo martes.
Correos arrastra un agujero contable de 1.200 millones
Correos arrastra un agujero contable de 1.200 millones de euros, lo que motivó que Sepi, la empresa y los sindicatos CCOO y UGT firmaran en julio un acuerdo marco en el que se establecieron las líneas estratégicas para la recuperación, reposicionamiento y transformación de la empresa pública.
El acuerdo incluyó una inyección cercana a los 3.900 millones para la entidad postal y la financiación anual del Estado, según el nuevo plan, se duplica hasta alcanzar casi los 250 millones anuales.
En la mesa de negociación, Correos ha resumido ante los sindicatos su visión actual de la empresa y sus necesidades a futuro, en alusión al citado acuerdo marco.
En ese sentido, la dirección de la compañía postal que emplea a más de 50.000 personas ha recordado, según la misma fuente, que su negocio depende del segmento tradicional en un 66 % y que esa situación «lleva a la ruina».
Correos ha insistido, ha informado a EFE la misma fuente, en la necesidad de gestionar «un mayor número de paquetes y más rentables», dejando atrás el 17 % actual de cuota de mercado para ir a entre un 34 % y 40 %.
En 2023, ha añadido, los costes de personal de Correos representaron un 85 % sobre la facturación, con una edad media actual superior a 51 años, un nivel de absentismo superior al 9 % y más de 2.500 personas como personal readaptado.
Una plantilla mal distribuida
La dirección ha comentado a los representantes sindicales que la plantilla está «mal distribuida», con un «inviable» 80 % en horario de mañana y un 20 % por la tarde, que a su juicio debería ser del 60 % y 40 %, respectivamente; y solo un 1 % en fin de semana «cuando se requiere un porcentaje superior».
UGT ha solicitado que la comisión negociadora se centre en estas reuniones en la primera fase, que es «sacar adelante con el máximo consenso» el acuerdo marco que exige Hacienda.
Para ello, el sindicato requiere que la empresa facilite el texto con los términos concretos del acuerdo que pretende «cuanto antes».