El Gobierno baja el IVA del aceite y Yolanda Díaz ya esparce fango sobre los distribuidores

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha asegurado que controlará que las rebajas del IVA a la alimentación, como la anunciada hoy del aceite de oliva, llegan al bolsillo del consumidor y no sirven para incrementar los márgenes de las distribuidoras, algo que ha dicho ya «está pasando». Tiempo le ha faltado a la exlider de Sumar, una formación que acumula fracaso tras fracaso en las últimas elecciones autonómicas o europeas celebradas y cuya representación parlamentaria es inferior al 8% del total del Congreso de los Diputados -27 de 350 diputados-, para sembrar dudas sobre determinados comportamientos éticos y enfangar a los empresarios de la cadena de alimentación.

Durante la presentación este viernes del Plan estival 2024 de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, Díaz se ha referido a la medida que aprobará el próximo Consejo de Ministros para prorrogar la rebaja del IVA en determinados alimentos básicos, así como suprimir este gravamen sobre el aceite de oliva (que hoy ha anunciado el Gobierno).

La vicepresidenta segunda y Ministra de Trabajo acusa a los empresarios del sector, como del aceite de oliva, de repercutir el IVA en el precio de los productos para aumentar sus márgenes

«Esa bajada del IVA en el aceite, el pan y otros alimentos que negociamos tiene que controlarse para que llegue al consumidor final. Insisto, porque esto está pasando», ha dejado claro la ministra.

Al tiempo que ha advertido que, de no hacerlo, «lo que estamos haciendo nuevamente es favorecer a las grandes empresas de la distribución» que, junto a otros sectores económicos como el energético o el financiero, «se está forrando en España».

«En democracia hay que redistribuir y los beneficios que tienen las grandes empresas de distribución son enormes. Por tanto, hay que actuar sobre ellos», ha añadido.