El Consejo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha aprobado los cambios necesarios para implementar la nueva modalidad de salidas a bolsa «BME Easy Access», que permitirá a las empresas empezar a cotizar sin la exigencia de obtener una distribución mínima de acciones o «free float» previa.
La nueva modalidad, presentada el pasado 21 de mayo junto a Bolsas y Mercados Españoles (BME), pretende facilitar y hacer más flexibles los procesos de salida a bolsa, ya que permitirá a las compañías salir a bolsa sin tener antes que colocar sus acciones en el mercado, ya que desde su admisión a negociación tendrán un plazo de dieciocho meses para acometer la colocación de sus títulos.
De este modo, subraya la CNMV en un comunicado remitido este miércoles, el proceso de salida a bolsa quedaría separado de las circunstancias macroeconómicas y de liquidez de los mercados, lo que favorecerá la planificación de las empresas y evitará el riesgo de que circunstancias ajenas a la compañía frustren la operación.
La CNMV también destaca que España se convierte en el primer país en permitir esta nueva modalidad que anticipa algunas medidas contempladas en la «Listing Act» aprobada por la Unión Europea para revitalizar los mercados públicos.
La CNMV ha dado el visto bueno a la modificación de la Circular de la Admisión a Negociación de las Bolsas
Además, la medida responde también a una de las recomendaciones del informe de la OCDE para revitalizar los mercados de capitales españoles.
Para la aprobación de esta nueva modalidad, la CNMV ha dado el visto bueno a la modificación de la Circular de la Admisión a Negociación de las Bolsas, y la Circular de la Sociedad de Bolsas relativa a las Normas de Funcionamiento del Sistema de Interconexión Bursátil.
Con esta nueva modalidad, explica la CNMV, se invierte la secuencia temporal de la salida a bolsa, que comienza con la verificación del folleto, seguida de una admisión sin distribución.
Las empresas que quieran acogerse a esta modalidad deberán tener una valoración superior a 500 millones de euros, aunque la CNMV podría autorizar el acceso a compañías de menor capitalización.
Asimismo, cuando el emisor estime oportuno, y en un plazo de hasta dieciocho meses prorrogables, realizará una o varias colocaciones (mediante bloques u OPV/OPS) tras elegir el momento temporal con escasa antelación, en lugar de los varios meses previos a la salida a bolsa a través del procedimiento tradicional.
Hasta que se obtenga el ‘free float’ requerido (actualmente y de forma general es del 25 %, aunque puede haber excepciones en funciones de los criterios de la CNMV), la negociación se realizará exclusivamente entre inversores profesionales, a través de la modalidad de bloques.
Las acciones de la compañía empezarán a negociarse en la modalidad de contratación general
Una vez se obtenga la difusión suficiente, las acciones de la compañía empezarán a negociarse en la modalidad de contratación general del Sistema de Interconexión Bursátil Español, SIBE.
Si pasados los dieciocho meses desde la admisión inicial no se obtiene una distribución suficiente del capital, la CNMV procederá a analizar la situación y, en función de las circunstancias, podría ampliar dicho plazo o dar por cumplido el requisito de ‘free float’ con la distribución conseguida hasta esa fecha, según la legislación vigente.
Si tras una eventual extensión del plazo, la compañía no llevase a cabo la colocación, la CNMV procedería a la exclusión de oficio de las acciones.
«BME Easy Access es una opción complementaria que no sustituye al procedimiento tradicional», recuerda la CNMV.