Vox pregunta por las medidas para frenar la caída de matriculaciones

Los seis diputados de Vox por Castilla y León presentaron una batería de preguntas al Gobierno sobre el descenso de matriculaciones y las ventas de turismos diésel en Castilla y León. Ahora, recordaron, el Ejecutivo deberá responder en 20 días, si bien podría pedir una prórroga con la misma duración. Los diputados de Vox de Castilla y León piden que se precisen las medidas previstas para detener la caída de matriculaciones; las alternativas y ayudas para la industria automovilística para adaptarse a la entrada en vigor de la nueva normativa de emisiones, que obligará a los fabricantes a no rebasar en su mix de ventas los 95 gramos de CO2 y la evaluación del impacto de las medidas adoptadas respecto al diésel.

El partido precisó en un comunicado que las matriculaciones de turismos cayeron en Ávila el año pasado un 11,8 por ciento, según fuentes de las patronales Anfac, Faconauto y Galvam. Este descenso está por encima del dato registrado a nivel autonómico y que habla de una bajada del 9,5 por ciento con relación a 2018, hasta las 35.172 unidades, mientras que en el conjunto de España las ventas cayeron un 4,7 por ciento, hasta los 1,25 millones.

Por provincias, en Castilla y León el mayor descenso interanual se contabilizó en Burgos(13,6 por ciento), hasta las 5.901 unidades matriculadas. A continuación se situaron Palencia, con un 13,3 por ciento menos (2.092 en total); Soria, con un 12,5 por ciento menos (1.287); Ávila, con un 11,8 por ciento menos (2.219); Salamanca, con un 9,7 por ciento menos (4.220); León, con un 8,4 por ciento menos (6.581); Zamora, con un 7,5 por ciento menos (2.030); Valladolid, con un 6,7 por ciento menos (8.606); y cierra la tabla Segovia, con un 5,5 por ciento de matriculaciones menos (para un total de 2.236).

Por tipo de motor, las ventas de turismos diésel en la Comunidad se desplomaron un25,8 por ciento, según Vox, hasta las 9.852 unidades frente a las 13.281 registradas en 2018. Además, el partido indicó que las ventas de turismos con motores de gasolina en Castilla y León bajaron un 6,1 por ciento, hasta las 21.010. Esta caída, añadió, contrasta con el aumento del 2,2 por ciento en España. El resto de combustibles sumó 4.310 matriculaciones en la Comunidad, con un incremento del 33,6 por ciento frente al 39,5 por ciento más que en la media.