Alquiber te da las claves para saber con antelación si un área de servicio está junto a la autovía
Ya sea para repostar, para despejarse con un café y estirar las piernas o por una urgencia fisiológica, las paradas durante un viaje largo no sólo son inevitables sino también muy recomendables en lo relativo a la seguridad vial. Sin embargo, a nadie le gusta que estas detenciones le demoren innecesariamente y retrasen su hora prevista de llegada al destino, por lo que, en los trayectos de autovía, solemos preferir las áreas de servicio que se sitúan junto a la carretera. Pero ¿cómo saber si la próxima tiene un acceso y una reincorporación rápida? ¿Cómo asegurarnos de que no se encuentra a las afueras de un pueblo a varios kilómetros de la autovía?
Los expertos de Alquiber, la empresa líder en el negocio del renting flexible, tienen la respuesta: para saber si la gasolinera se encuentra en el área de la influencia de la autovía sólo hay que fijarse bien en los carteles que anuncian los desvíos a estas áreas de servicio.
Los trucos más comunes, como fijarse en el monolito promocional de la estación de servicio, no siempre sin fiables, ya que la perspectiva puede confundirnos y hacernos tomar por cercano el monoposte de una gasolinera dispuesta en sentido contrario. Sin embargo, las señalizaciones de las autovías y las autopistas que no son de peaje -en las de pago, por ley, siempre deben estar al borde de la vía- no mienten.
Las señales de preseñalización en las que aparece el icono de un pequeño surtidor y la distancia a la que se encuentra la salida es una de las indicaciones más claras: si los metros que aparecen para el desvío son 1.000 o 500, la gasolinera está junto a la autovía; si estas señales se anuncian la salida a 750 o 250 metros, la estación de servicio se encuentra en una carretera secundaria.
Además, por norma general, estas señales suelen ser azules y sólo cambia de color la última de la serie, la que indica la salida inmediata -verde o blanca en caso de que accedan a vías de menor rango-. Si este panel también es azul, la estación de servicio estará junto a la vía; si es verde, la gasolinera se ubicará en las inmediaciones, pero no en la autovía; y si es blanco, nos obligará a aventurarnos por una carretera convencional en la que nunca se sabe a qué distancia puede estar el surtidor, la cafetera y el aseo.
En cualquier caso, y siempre que las urgencias e imprevistos de última hora lo permitan, el navegador del coche y las aplicaciones para móviles ofrecen toda esta información y la posibilidad de programar el viaje y sus paradas con antelación. Además, recuerda que la ley obliga a que las estaciones que dan servicio a una carretera se sitúen entre ellas a una distancia mínima de 20 kilómetros y nunca estén separadas unas de otras por una distancia superior a entre 40 y 60 kilómetros.