La multinacional de hemoderivados Grifols ha anunciado este jueves que su terapia de inmunoglobulinas ha dado efectos positivos en pacientes con síndrome pospolio en un ensayo de fase 2/3.
El ensayo demostró «una mejora significativa en la distancia andada en la prueba de marcha de dos minutos, en comparación con el placebo, tras un año de infusiones con inmunoglobulina intravenosa (IgIV)», según ha destacado la firma en un comunicado.
Los pacientes afirmaron que el tratamiento les pareció «seguro y bien tolerado», con un perfil de seguridad similar al de la administración de IgIV para otras indicaciones, ha añadido.
El síndrome pospolio no cuenta con medicamentos específicos para su tratamiento en estos momentos y las terapias se limitan a medidas de apoyo.
«Este estudio es una gran noticia, ya que demuestra que el deterioro continuo de la función física debido al síndrome pospolio, que hasta ahora se consideraba inevitable, puede detenerse e incluso mejorarse», ha dicho el doctor Frans Nollet, del Centro Médico de la Universidad de Ámsterdam (Amsterdam UMC) y uno de los investigadores principales del estudio.
“Los pacientes que recibieron infusiones mensuales de IgIV en una dosis de 1 g/kg mostraron una mejora estadísticamente significativa en la 2MWD en comparación con el placebo”, dice Grifols, que añade que el cambio medio en la distancia recorrida en dos minutos, según las medias de los mínimos cuadrados desde el inicio del tratamiento hasta la semana 52, ajustado por diferencias entre grupos, fue de 12,75 metros, lo que equivale a una mejora media de 6,07 metros en comparación con el placebo.