La bajada del IVA del gas, de la que se excluye al butano y propano, entra en vigor

Este sábado entra en vigor la rebaja del IVA del 21 % al 5 % en la factura del gas natural aprobada por el Gobierno para proteger a los consumidores en un contexto marcado por la escalada de los precios de la energía que sufre Europa tras la invasión rusa de Ucrania. Este medida solo beneficiará a los consumidores que usan este tipo de gas. Los millones de usuarios, tanto familias como empresas que utilizan butano y propano, -el propano es muy utilizado en el sector de hostelería, sanitario y educación y en los lugares de la España vaciada donde no llega el gas natural- seguirán pagando un 21% de IVA en los ya de por sí elevados precios de ambos combustibles, de los que solo está regulado la botella de butano de 12,5 kilos antigua y no disponible en todos los operadores del mercado.

Miles de clientes particulares que en España usan GLP canalizado, a los que hay que sumar los que lo hacen por tanque a granel o en botellas, quedan discriminados con la rebaja fiscal del IVA al gas natural

200.000 empresas que utilizan en España GLP canalizado, a las que hay que añadir los negocios que lo hacen con otros formatos, seguirán pagando un IVA del 21%, frente al 5% del gas natural, pese a que los dos combustibles sirven para el mismo cometido

La medida, que estará en vigor desde este sábado y hasta final de año, aunque podría prorrogarse más allá de esa fecha, supondrá un ahorro conjunto de 210 millones de euros para familias y empresas, según el Ejecutivo, y de entre cinco y diez euros al mes, dependiendo del consumo, según la asociación de consumidores Facua.

La rebaja también se aplicará en todos los suministros de gas natural destinados a las calderas de las comunidades de vecinos que, por los volúmenes que manejan, no pueden acogerse a la tarifa regulada (TUR), cuya subida está limitada por el Gobierno a un 5 % por trimestre, así como a la compra de astillas, pélets y leña, pero no la butano, propano o gasóleo de calefacción.

En cuanto a las comunidades de vecinos, el Gobierno lleva tiempo trabajando en ofrecer una solución a las comunidades de propietarios con caldera de gas centralizada, probablemente a través de «una solución específica para ese tipo de consumo» para que, mientras el gas esté tan alto, puedan tener también un sistema de contención del precio de la energía.

REDUCE UN 80 % LOS IMPUESTOS ELÉCTRICOS

El butano y el propano, excepto para la botella de 12,5 kilos, que tiene un precio regulado, han quedado fuera de todas las medidas de beneficios fiscales que ha recibido la energía en los últimos meses. Desde el pasado junio, la factura de la luz cuenta con un IVA del 5 %, después de que el Gobierno lo rebajará primero desde el 21 % hasta el 10 %, y después hasta el tipo actual, que no existe en la normativa de este impuesto, pero que permite una reciente directiva europea.

Además, también están en vigor tanto la reducción del impuesto especial sobre la electricidad al 0,5 %, como la suspensión del impuesto a la generación eléctrica, medidas que, sumadas a la reducción del IVA, tienen un coste para el Estado de 1.800 millones cada trimestre, según el Gobierno.

Asimismo, desde el 15 de junio funciona el llamado «mecanismo ibérico», que limita el precio del gas natural destinado a la generación eléctrica. Aunque en este caso, la diferencia entre el tope de gas y el precio real no será pagada por el Estado, sino por los propios consumidores que recibirán un nuevo cargo, de los múltiples que existen, en su recibo de la luz.