La aerolínea de billetes baratos Ryanair informó este sábado de que recibirá 29 aviones Boeing 737 en 2025, lo que supondrá la creación de más de 2.000 puestos de trabajo altamente remunerados para profesionales de la aviación.
Los nuevos aviones B737 de Ryanair, que reducen las emisiones de CO2 en un 16 % y el ruido en un 40 %, se destinarán a aeropuertos de bajo coste en países de la Unión Europea (UE) donde los Gobiernos incentiven el crecimiento de la aviación, como son Suecia, Italia, España y Polonia, indicó la compañía en un comunicado.
Elena Cabrera, gerente de Ryanair en España, indicó en la nota que, mientras que la mayoría de las aerolíneas europeas «siguen teniendo limitaciones de capacidad», Ryanair tiene previsto recibir 29 nuevos aviones Boeing 737 en 2025.
«Esta capacidad adicional permitirá a Ryanair aumentar el número de pasajeros de 200 millones en 2024 a 210 millones en 2025 y crear 2.000 puestos de trabajo altamente remunerados para profesionales de la aviación en muchos de los aeropuertos más eficientes y de bajo coste de Europa», aseguró.
Ryanair acusa a Consumo de inventarse una multa por ‘razones políticas’ basada en una ley de Franco
La aerolínea de bajo coste irlandesa Ryanair anunció el pasado mes de noviembre que recurrirá las multas sobre equipaje impuestas en España, que califica de «ilegales», «infundadas» e «inventadas» por el Ministerio de Consumo por razones políticas que violan la legislación europea.
«Estas multas ilegales en España, basadas en una antigua ley de los años 60, -es decir, cuando gobernaba el General Franco-, previa a la adhesión de España a la Unión Europea, destruirían la capacidad de las aerolíneas de bajo coste de generar ahorro para los consumidores mediante tarifas más económicas», ha advertido en un comunicado el consejero delegado (CEO) de Ryanair, Michael O’Leary.
En este sentido, ha insistido en que el éxito de Ryanair y de otras aerolíneas de bajo coste en España y en toda Europa en los últimos años se debe completamente al régimen de Cielos Abiertos de Europa y a la libertad de las aerolíneas para establecer precios y políticas sin interferencias de los gobiernos nacionales, «que es precisamente lo que estas multas ilegales de España pretenden socavar».