GSK y la Universidad de Oxford han iniciado una colaboración de investigación para desarrollar vacunas que prevengan el cáncer. Este acuerdo, respaldado por una inversión de más de 59 millones de euros, busca entender cómo se origina la enfermedad y cómo el sistema inmunológico puede prevenir su desarrollo.
Una alianza para la prevención del cáncer
El Programa de Inmunoprevención del Cáncer GSK-Oxford estudiará la biología pretumoral para identificar mecanismos clave en la progresión del cáncer. La Universidad de Oxford aporta su experiencia en secuenciación de neoantígenos, proteínas específicas del tumor que activan la respuesta inmunitaria. Esto permitirá diseñar estrategias de vacunación capaces de frenar la evolución de células precancerosas en tumorales.
Tony Wood, director científico de GSK, destacó que esta colaboración fortalece la relación con la Universidad de Oxford. «Nuestro objetivo es generar conocimientos clave para las personas en riesgo de desarrollar cáncer, combinando nuestra experiencia en inmunología con la investigación avanzada de Oxford», afirmó.
Por su parte, la profesora Irene Tracey, vicecanciller de la Universidad de Oxford, subrayó la importancia de unir a expertos en ensayos clínicos, inmunooncología y vacunología. «Esta alianza nos acerca al desarrollo de vacunas contra el cáncer, ofreciendo esperanza a pacientes de todo el mundo», explicó.
Apoyo gubernamental a la investigación biomédica
El secretario de Ciencia y Tecnología del Reino Unido, Peter Kyle, señaló que el cáncer ha afectado a muchas familias. «Gracias a colaboraciones como la de Oxford y GSK, podemos aprovechar la innovación científica para mejorar el diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad», expresó.
El Gobierno británico ha destinado 129 mil millones de euros al sector de ciencias de la vida como parte de su Plan para el Cambio. Esta inversión busca transformar la salud pública y fortalecer la economía mediante avances en investigación biomédica.
Un compromiso con la innovación
La relación entre GSK y Oxford no es nueva. En 2021, ambas entidades crearon el Instituto de Medicina Molecular y Computacional. Este centro ha acelerado el desarrollo de fármacos mediante el uso de inteligencia artificial y genómica funcional, mejorando la velocidad y eficacia de los tratamientos.
Esta nueva iniciativa reafirma el compromiso de GSK y Oxford con la inmunoprevención del cáncer. La investigación podría sentar las bases para el desarrollo de vacunas que revolucionen la lucha contra esta enfermedad a nivel global.